El sitio web, The Conversation, reseñó que un equipo de expertos de la Universidad de Binghamton en Estados Unidos (EE.UU), ha descubierto que algunas tintas para tatuajes contienen sustancias potencialmente dañinas que no están indicadas en las etiquetas de los productos comercializados en el país, representando un riesgo para la salud de quienes se tatúan.
La popularidad de los tatuajes ha aumentado significativamente en los últimos años, lo que ha generado una mayor demanda de tintas para realizarlos. Sin embargo, las tintas disponibles en el mercado estadounidense han sido escasamente reguladas por las autoridades sanitarias, indicó el portal.
En este sentido, el científico John Swierk, destacó que los pigmentos utilizados en los tatuajes actuales están fabricados con moléculas sintéticas, lo que permite obtener colores más vibrantes. Además, señaló que tanto artistas independientes como grandes empresas son responsables de la fabricación de estas tintas para tatuajes.
Escrito por: Vianne Antón


