La mañana de este miércoles 11 de enero, miles de vuelos en todo Estados Unidos fueron suspendidos temporal o definitivamente tras un fallo informático en el sistema de la Administración Federal de Aviación (FAA) del país que ya ha sido solucionado.

Según la FAA todos los aviones se quedaron en tierra, lo que provocó un caos generalizado en los aeropuertos del país a pesar del compromiso de las autoridades, en trabajar para resolver el incidente.

“La falla se dio durante una alerta que contiene información esencial para los trabajadores que operan los vuelos. Las operaciones en todo el espacio aéreo nacional se han visto afectadas”, recalcó la FAA.

Las autoridades calculan que más de 4.000 vuelos se vieron afectados y sufrieron demoras en numerosos puntos del país, mientras que unos 700 fueron directamente cancelados, lo que ha levantado la polémica entre los pasajeros.

Escrito por María Alejandra Guevara