La tarde del miércoles 17 de abril se registraron fuertes lluvias en diversas zonas de la capital, además de varias regiones del territorio nacional, en medio de una sequía complicada, que ocasionó numerosos incendios en zonas montañosas, algunos por causas naturales y en su mayoría por intervención humana.

En el caso de la capital, tuvo mayor incidencia en áreas como la autopista Francisco Fajardo (hoy Gran Cacique Guaicaipuro), además de la autopista regional del centro, que se vieron afectadas por inundaciones en varios de sus tramos, que generó lentitud en el flujo vehicular y un tráfico complejo.

Las descargas eléctricas ocasionaron apagones en zonas populares y residenciales, en el Este y Oeste caraqueño, así como fallas en el servicio de operadores de Internet y televisión satelital.

De acuerdo a información recabada en redes sociales, zonas como Brisas de Propatria, en el municipio Libertador, estuvieron anegadas, al igual que el kilómetro 1 de La Yaguara, donde se reportaron desbordamientos.

Asimismo, en la avenida Casanova de la parroquia El Recreo, varios árboles se vieron sacudidos por los fuertes vientos y precipitaciones, hasta caer sobre el pavimento, dificultando el paso peatonal.

Por otra parte, regiones como Miranda, Aragua, La Guaira, Guárico, entre otras, sufrieron los embates de las lluvias, que según reportes del Instituto Nacional de Metereología e Hidrología (Inameh) el 2 de abril, este mes representaría el inicio de las precipitaciones en el país, como consecuencia del fenómeno climático El Niño.

Se espera que este jueves 18, continúen las lluvias en varias entidades y en la capital, por lo que las autoridades de Seguridad Ciudadana, exhortan a la toma de previsiones.

El equipo de Protección Civil, publicó en diversos medios, las recomendaciones a la población, para evitar inundaciones de gran impacto y resguardar vidas:

No arrojar desechos sólidos en ríos y quebradas.

Depositar la basura en lugares adecuados.

Mantener limpios techos, canales y drenajes de las viviendas.

Evitar conducir en calles anegadas.

Encender las luces de los vehículos mientras llueva y conducir con precaución.

Guardar artículos que se los puedan llevar el viento o que sean arrastrados por el agua.

Escrito por: Emmanuel Chaparro