Un juego tenso se vivió en el Estadio Parken Stadion, Dinamarca, cuando el club de Manchester City, triunfó 3-1 ante el FC Copenhague, en la ida de los octavos de final.

De acuerdo a especialistas y medios locales, el resultado fue contradictorio, porque aunque el desempeño de los dirigidos por Pep Guardiola, fue evidente en el dominio del balón mientras transcurrió el torneo, requirieron de una cuota de suerte para alcanzar los tres puntos.

En el primer tiempo Manchester empató 1-1 casi finalizando el primer tiempo, luego de un error cometido por el arquero Ederson que dejó espacio para marcar la rayita a Magnus Mattson y colocar temporalmente al Copenhague fuera de peligro.

Sin embargo, el Manchester mantuvo el control, con intentos de ataques organizados predestinados a otra anotación, pero el Copenhague seguía en orden y no permitió espacios despejados por varios, hasta que en el minuto 92, Phil Foden marcó el gol del triunfo para sellar el juego 3-1.

De esta manera, Manchester City, venció en el encuentro con muchas dificultades, frente a un rival complicado que no dio oportunidades para celebraciones anticipadas.

Escrito por: Emmanuel Chaparro