El pelotero venezolano Miguel Cabrera jugará su último partido de las Grandes Ligas el domingo 1 de octubre, cuando su equipo Tigres de Detroit se enfrenten a los Guardianes de Cleveland en el estadio Comerica Park.
Sin embargo, mientras se alista para ese día, declaró en una entrevista radial que desea seguir siendo parte de los felinos no como coach sino cumpliendo un rol especial que le permita estar presente con los jugadores jóvenes y orientarlos para mejorar sus jugadas y técnicas importantes que agilicen su desempeño.
“Quiero quedarme en este equipo y, ayudar a hacer algo. No quiero ser coach, quiero estar moviéndome. Vamos a ver que pasa. Pero quiero estar cerca de estos chicos. Esos chicos son especiales. Están creciendo ahora mismo, están madurando. Creo que el año que viene van a ser mejores”, expresó.
En la actualidad, Cabrera se unió a los exgrandeligas estadounidenses Willie Mays y Hank Aaron, al batear de por vida 3 mil o más inatrapables, 500 o más cuadrangulares.
De acuerdo a lo publicado por el Detroit Press, hoy cuenta con estas cifras: 3.168 incogibles, 624 dobles, 510 jonrones y un promedio de bateo de .306.
Ha jugado de por vida junto a Detroit 2.072 encuentros, detrás de Ty Cobb, Charlie Gehringer, Al Kaline, Alan Trammell y Lou Whitaker.
Esta semana los Tigres jugarán en casa ante Reales de Kansas City y también contra Guardianes de Cleveland.
Escrito por: Emmanuel Chaparro


