En medio de una ola de violencia sexual hacia mujeres y niñas que son víctimas de violación, la Organización de Naciones Unidas (ONU) solicitó este viernes 14 de julio a la República Democrática del Congo (RDC) y a varios grupos armados que operan en este territorio, a tomar acciones para frenar esta problemática.

La alta comisionada adjunta para los refugiados y su protección, Gillian Triggs, explicó que en los primeros tres meses del 2023, más de 20.000 féminas víctimas de la violencia de género, acudieron a buscar ayuda, con un 66% de casos directos de la provincia de Kivu Norte.

“En un contexto de gran inseguridad y desplazamiento, y donde las denuncias son limitadas por el miedo al estigma y la vergüenza, esas cifras exponen una situación parcial, con muchas sobrevivientes (de violencia sexual) que no pueden o no quieren buscar ayuda”, explicó.

Denunció que este tipo de agresión permanece en sitios donde residen desplazados internos y en el que las mujeres y niñas son atacadas cuando salen en la búsqueda de alimentos, hidratación o leña para cocinar.

“Las informaciones documentan la existencia de 1.000 lugares en Goma (Kivu Norte) donde las mujeres y niñas desplazadas son forzadas a aceptar mantener relaciones sexuales para sobrevivir, incluso en los campos de desplazados”, aseveró.

Triggs recordó que las primeras autoridades nacionales y regionales deben cumplir con garantizar la seguridad integral de los civiles, al mismo tiempo que pidió al Estado congolés que decrete la clausura de las denominadas casas de tolerancia (prostíbulos), donde la práctica de la esclavitud sexual es común en ciudades como Goma y Karisimbi.

Escrito por: Emmanuel Chaparro