El Gobierno talibán afgano, afirmó que la prohibición a las mujeres afganas de trabajar para Naciones Unidas es un asunto social interno, esto después de que el Consejo de Seguridad de la ONU lo exhortara a que la medida sea revertida.

En ese sentido, el Ministerio afgano de Relaciones Exteriores, en comunicado, dijo: “Conforme a las leyes internacionales (…) de respetar las opciones soberanas de Afganistán, se trata de un asunto social interno, sin impacto sobre los Estados extranjeros”.

Asimismo, la institución explica que continúan con el compromiso de “garantizar todos sus derechos a las mujeres afganas”, no obstante, recalcan: “La diversidad de opiniones debe ser respetada y no politizada”.

Esta decisión tomada por los talibanes es condenada por la resolución que adoptaron, por unanimidad, los 15 miembros del Consejo, además de ser copatrocinada por 90 Estados que integran la ONU.

“Compromete los derechos humanos y los principios humanitarios”, dice este organismo, el cual hace un llamado a los talibanes a revertir sus políticas y prácticas, por restringir el pleno ejercicio de los derechos humanos y libertades fundamentales, tanto de las mujeres como de las niñas.

La institución es enfática en el acceso de las féminas a la educación y al empleo, así como a la libertad de circular y participar plenamente, con igualdad de condiciones, en la vida pública.

Los Estados y organizaciones políticas recibieron un exhorto, por parte del Consejo de Seguridad de la ONU, a usar su influencia para promover la anulación de estas políticas y prácticas.

Escrito por: Angelimar Castro Reyes