Por primera vez en el Clásico Mundial de Béisbol (CMB), un equipo consiguió la mayor anotación de la historia, Corea del Sur logró derrotar a la selección de China 22 carreras por 2 en tan solo cinco innings.

El partido inició con un sencillo de Jung Hoo Lee para anotar la primera carrera. En los dos primeros episodios lograron cuatro carreras para poner el juego 4-2.

Durante la tercera entrada los coreanos lograron imponerse con ocho carreras y poner prácticamente en jaque mate a los chinos con 12-2.

Posteriormente, en el cuarto turno Kunwoo Park pegó un cuadrangular con las bases llenas para dejar ese inning con seis rayitas más a favor que serían 18-2.

En el quinto episodio se lució Ha-Seong Kim con el segundo grand slam de la noche y sellaron el marcador con cuatro carreras dejándolo 22-2.

Este juego fue catalogado como “la verdadera muestra del poder de los asiáticos”.

Escrito por: Osmahil Herrera