El pasado jueves se pudo realizar la tercera boda de Britney Spears con el entrenador y actor Sam Asghari, pero no fue tan fácil darse, debido a que el ex primer esposo de la princesa del pop Jason Alexander irrumpió en el recinto donde se daría este evento, para evitar el casamiento. Afortunadamente esta situación no llegó a mayores ni impidió la nupcia

La boda tan esperada de la princesa del pop Britney Spears logró realizarse el pasado jueves, con el entrenador y actor Sam Asghari. Fue un evento muy privado en compañía de algunos familiares y amigos de la cantante. Tuvo como locación la casa de Thousand Oaks en Los Ángeles.

Como se sabe, Britney lleva en conflictos y disputas por muchos años con algunos miembros de su familia como lo es con James Spears, el padre de la artista y ahora recientemente con su hermana,  Jamie y madre, Lynne, por este motivo, no fueron invitados ni hicieron acto de presencia en esta boda. Sin embargo, su hermano Bryan si formó parte de los asistentes de esta boda.

Esta se convertiría en la tercera boda de Britney, debido a que primero lo tuvo con su amigo de la infancia Jason Alexander en el 2004 y esta tan solo duró pocas horas, fue una tremendura de Spears en Las Vegas. El segundo fue con el bailarían Kevin Federline, quien es el padre de sus dos hijos, Sean y Jayden,  duró entre el 2004 al 2007.

Algo que causó impresión durante el día del casamiento de Spears es que el primer ex esposo de la cantante Jason Alexander,  irrumpió de forma inesperada en el recinto donde sería la boda, horas antes de realizarse y mientras grababa su hecho ilícito en Instagram Live.

Fue descubierto y detenido sin complicación cuando se acercó a la mansión. Cabe recordar, que la pareja ha pasado últimamente por mucho durante su amorío, ya que, revelaron hace unas semanas que la cantante perdió su tercer bebé, fruto de su relación con Asghari.

Escrito por: Keyla Ramos

Instagram: @2mplkeyla2

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